Desde el primer día, el cliente ahorrará en su factura eléctrica convencional y en un plazo aproximado de entre 5 y 7 años, se habrá recuperado la inversión. Estos tiempos dependerán de los distintos factores que afectan al plan de negocio del cliente:
- Un correcto diseño de la instalación (orientación, inclinación).
- Un correcto dimensionado de la instalación de acuerdo a las curvas de consumo, minimizando el nivel de excedentes.
- Ubicación geográfica de la instalación.
- Tarifa eléctrica actual.