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10 consejos para poner a punto tu caldera durante el invierno

10 consejos para poner a punto tu caldera durante el invierno

Una comprobación a tiempo evitará que te ‘quedes helado’ cuando intentes encender tu caldera en invierno

 

 

Una comprobación a tiempo evitará que te ‘quedes helado’ cuando intentes encender tu caldera en invierno y te des cuenta de que ha ampliado más de la cuenta sus vacaciones de verano…

 

El invierno ya esta aquí: el aire acondicionado de tu casa ya hace tiempo que dejó de funcionar y tu caldera se encuentra a pleno rendimiento para mantener caliente tu hogar. O eso crees tú… ¿Realmente se encuentra en perfecto estado? ¿Has comprobado que todo funciona perfectamente y que no tendrás ningún problema cuando necesites subir la temperatura de tu casa o usar el agua caliente?

 

Si no es así, no te preocupes: aquí tienes una serie de consejos que te ayudarán a que tu caldera de gas mantenga su estado de forma y no desfallezca durante la época  más fría del año: 

 

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Subvenciones para instalar placas solares fotovoltaicas 

 

Como ya hemos mencionado, al ahorro y las posibilidades de financiación de las placas solares fotovoltaicas para autoconsumo se suman una serie de subvenciones que hacen de su instalación una inversión sobresaliente. 

 

En la actualidad se pueden encontrar subvenciones de dos tipos para estos dispositivos. Por una parte, están las subvenciones sobre el precio de instalación, que son administradas por las comunidades autónomas; por otra, las subvenciones sobre impuestos del Estado, gestionadas por los municipios y que están relacionadas con tasas como el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) o el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO). En ambos casos, tendrás que averiguar cuál es la autoridad regional o local competente a la que deberás dirigirte en función del lugar en el que vivas, ya que varía por territorios. 

 

En términos generales, para recibir cualquier subvención para placas solares fotovoltaicas hay que cumplir una serie de requisitos mínimos: disponer de un presupuesto detallado de la instalación, no haber solicitado ayudas de este tipo con anterioridad y que la potencia instalada en la vivienda sea la adecuada. Además, sólo se podrá subvencionar un sistema de energía fotovoltaica por inmueble y el solicitante deberá ser el propietario de la casa o la empresa instaladora, siempre que esta última cuente con el permiso acreditado del propietario para hacerlo. 

 

Otras ventajas de las placas solares fotovoltaicas para viviendas

 

Además del ahorro inmediato, las placas solares fotovoltaicas para viviendas ofrecen otras muchas ventajas. Para empezar, su sola instalación incrementa el valor del inmueble, y eso, sumado a su larga vida útil, hace que sea posible recuperar total o parcialmente la inversión en caso de vender la casa. 

 

Por otra parte, es una energía limpia, sostenible, respetuosa con el medioambiente y que aprovecha uno de los recursos naturales renovables más abundantes de España: el Sol. Con la instalación de estas placas en casa contribuirás a la lucha contra el cambio climático y a mejorar la calidad de vida de las generaciones venideras. 

 

Una ventaja más es la comodidad que proporcionan a sus dueños, ya que apenas necesita mantenimiento. Las placas solares fotovoltaicas son robustas y ofrecen gran resistencia a las inclemencias del tiempo y a los cambios bruscos de temperatura. Tal es su dureza que Endesa X garantiza los equipos durante 12 años. Además, estos sistemas se monitorean en remoto, por lo que, si surge algún problema, recibirás una notificación en el dispositivo que elijas con la información necesaria para resolver la incidencia. 

 

Por último, no hay que olvidar la estabilidad que proporcionan a sus dueños. Con un mercado energético en el que los precios fluctúan tanto, en especial cuando hay fenómenos meteorológicos adversos, las placas solares fotovoltaicas para viviendas aseguran facturas reducidas sin importar lo que ocurra con la red nacional de electricidad.  

 

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  1. Inspección visual. Haz un examen visual y comprueba que todas las piezas de la caldera se encuentran en buen estado (botones, llaves, etc.). Si detectas alguna incidencia (piezas desgastadas, que no funcionan correctamente, etc.), ponte en contacto con un especialista para que revise la instalación.
  2. Ventilación correcta. Una medida previa que debe efectuarse siempre es verificar que las rejillas de ventilación del lugar donde se encuentra la caldera están abiertas y libres de obstáculos. Así, en caso de una eventual fuga, el gas podrá salir al exterior sin problema.
  3. Presión. Comprueba en el manómetro de la instalación que los radiadores están llenos de agua y a una presión de entre 1 y 1,2 bares (cuando se caliente subirá a 2-2,5 bares).
  4. Conexión. Asegúrate de que el enchufe está conectado correctamente a la corriente eléctrica y de que la llave del gas está abierta. Si detectas olor a gas, cierra nuevamente la llave y no acciones ningún interruptor eléctrico o dispositivo que produzca chispa o llama. Abre las puertas y ventanas para ventilar la estancia y ponte en contacto con un profesional. 
  5. Encendido. Si tu caldera tiene ‘llama piloto’, enciéndela pulsando el mando. Si no lo consigues, repite varias veces la operación porque es posible que el circuito tenga aire. Si tu caldera no cuenta con ‘llama piloto’, en caso de bloqueos continuados por falta de llama, comprueba la correcta polaridad ‘fase-neutro’. Si es necesario, invierte el enchufe. 
  6. Color de la llama. Indica si la combustión se está produciendo bien (color azul) o no (amarillo o naranja). En el segundo caso, hay que llamar inmediatamente a un técnico para que revise la instalación.
  7. Temperatura. Asegúrate de que el selector ‘verano-invierno’ está en la posición de invierno. Ajusta la temperatura deseada para el agua y la casa (en este segundo caso, pon un valor superior a la temperatura ambiente existente en este momento).
  8. Bomba y radiadores. En caso de tener bomba de circulación, comprueba que gira correctamente. Asimismo, verifica que las llaves de los radiadores están abiertas y que no existen fugas de agua. Si algún radiador no calienta, posiblemente necesite un purgado de aire. Si disponen de purgadores automáticos de aire es normal que dejen escapar alguna gota. 
  9. Comprobación final. Observa el funcionamiento el sistema durante 5-10 minutos. Si observas alguna anomalía, avisa a un instalador.
  10. ¡Todo listo! Ya puedes estar seguro de que no pasarás frío en casa este invierno. También es importante conocer cuáles son las averías de calderas más habituales para detectarlas y solucionarlas a tiempo. Así, los problemas más comunes que podrán surgir en tu caldera son:
     1- Problemas de presión: puede que notes algunos zumbidos o ruidos extraños en tu caldera que podrían indicar que hay algún problema en la presión. Si escuchas un ruido silbante podría indicar que la presión de tu caldera es baja.  
    2- Falta de temperatura en radiadores: es posible que tus radiadores necesiten un purgado de aire para calentar y funcionar adecuadamente 
    3- Sonda de temperatura: se trata del indicador que utiliza la caldera para saber si debe calentar más el agua o no. Una avería de la sonda podría provocar que la caldera no caliente el agua de forma adecuada. 
    4- Avería en la bomba: un ruido de rozamiento durante el funcionamiento de la caldera podría indicar que hay una avería en la bomba. En este caso, lo mejor será llamar a un especialista. 
     

Además de seguir estos consejos, recuerda que es importante que mantengas tu caldera de gas en excelentes condiciones durante todo el año. Para ello, no te olvides de hacer las limpiezas (una vez al año) y revisiones pertinentes (cada dos años). Por último, recuerda que Endesa X pone a tu disposición la caldera que mejor se adapta a tus necesidades.