Los hogares privados ya no son solo consumidores de energía, sino que también productores gracias a la energía del sol. Pero, ¿cómo funciona este sistema? ¿Cómo se aprovecha la energía solar que nos llega hasta una instalación fotovoltaica instalada en nuestro tejado?
Para sacar partido de este recurso natural, lo primero que hay que realizar es la instalación de una placa fotovoltaica. Estos paneles solares son los que nos van a permitir ahorrar en la factura eléctrica. Eso sí, hay que tener siempre en cuenta la inversión inicial en la instalación fotovoltaica.
Para poder aprovechar la energía del sol, es necesario instalar estas placas solares pero también los inversores de red. Este aparato sirve para pasar la corriente continua (que es cómo llega la energía solar) en tensión alterna para poder utilizarla en ciertos electrodomésticos.
Además, para aprovechar la energía del sol debemos disponer de baterías solares y fotovoltaicas. Estos aparatos son un depósito donde se almacena la energía que se consigue de los paneles fotovoltaicos. Para evitar que estas baterías se sobrecarguen, deben llevar un regulador de carga.